En estas imágenes vemos el estado inicial de la pieza.
Lo primero que hicimos fue desmontar la maquinaria del reloj para evitar desajustes y roturas.
Tras esto comenzamos la limpieza de la pieza y la eliminación de rebarnizados de poliuretano.
A medida que limpiábamos se iba hundiendo parte de la chapa, o se rajaba, debido al ataque de carcoma. Pudimos comprobar que estaba hueco por dentro y que donde debía haber madera, solo quedaba serrín en el mejor de los casos.
Una vez limpio de suciedad y barnices, se desinsectó un par de veces. Una vez transcurrido el tiempo necesario, consolidamos toda la pieza y comenzamos con la reconstrucción volumétrica, así como a tapar todos los orificios de carcoma. Encolamos también el penacho que estaba suelto.
Ya solo nos queda rebajar algunas de las reconstrucciones volumétricas y comenzar con las cromáticas, pero eso será en otro momento, a medida que vayamos avanzando en el trabajo.
Mientras tanto, vamos limpiando y recuperando el péndulo de bronce
Pobre reloj, realmente está muy deteriorado. Tenemos ganas de ver el resultado final. En estos momentos también estoy acabando la restauración de un reloj alfonsino de pared, pero ni mucho menos tenia tanta afectación de carcoma, y la madera está en muy buen estado.
ResponderEliminarNos ha gustado mucho tu blog, realmente eres una gran profesional por lo que aqui se puede apreciar. Felicidades y nos seguimos viendo.
Muchos besos!
Si, estaba hecho polvo literalmente hablando, en breve subiré las imágenes de la pieza ya acabada.
EliminarMe alegro mucho de que os guste mi blog, muchas gracias por vuestros comentarios, seguimos en contacto.
Bts