Se hicieron las reconstrucciones volumétricas, en las siguientes imágenes vemos algunas de ellas.
Se asentaron chapas por medio de humedad, calor y presión.
Se chuleteó en donde fue necesario.
También se volvió a hacer una nueva limpieza esta vez con un jabón neutro, de esa forma conseguimos atenuar un poco las manchas tanto de la parte superior como de los interiores.
Tras este proceso volvimos a desinsectar al detectar en la base del escritorio unos nuevos orificios de carcoma. Se taparon y se siguió con el proceso de restauración.
Se limpiaron herrajes y se barnizaron.
Se sustituyeron las bisagras por unas nuevas.
Se puso la piel y el remate original.
Se hicieron las reintegraciones cromáticas necesarias y se le dió a la pieza un acabado con cera natural.
Pero esto será en una próxima entrada.
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