lunes, 11 de febrero de 2019

RECONSTRUCCIONES VOLUMÉTRICAS

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Este cajón pertenece a una cómoda del último tercio del s XIX.
Es una cómoda estucada y policromada sobre dicho estuco. Se encontraba en un estado lamentable.
Se había quemado y en muchas zonas había dejado de ser madera para pasar a ser carbón.


El cajón superior es del que voy a hablar



Desgraciadamente no tengo fotos iniciales en las que se aprecie en detalle las zonas quemadas y los importantes faltantes.
Desgraciadamente tampoco he terminado yo ese trabajo, pero si bien es cierto que lo comencé y que realicé un importante saneamiento de todas las zonas quemadas, hice una limpieza en profundidad,  realicé injertos de madera, reconstrucciones volumétricas con masilla de dos componentes y chuleteos en los bajos del cajón.
Pero vamos a relatar el proceso de manera detenida y vamos a ilustrarlo con las pocas imágenes de las que dispongo.

Cuando llegó esta pieza al taller, de lo primero que me percaté es que era una cómoda estucada y policromada y que se había quemado. 
La limpieza fue complicada porque el barniz de gomalaca con el calor se había degenerado y se había adherido de tal forma a la pieza, que era francamente complicado de retirar. La mejor opción para que no se dañase ni el estuco ni la policromía, fue retirarlo con calor.


Detalle del cajón una vez realizada la limpieza
Después se consolidó todo el estuco que se desprendía, con el fin de perder lo menos posible de las partes originales de la pieza.

El siguiente paso fue sanear toda la zona quemada, el fuego en la madera produce un daño irreversible, esta pierde sus propiedades, deja de ser madera para convertirse en carbón.
Una vez saneada, se rellenó toda la zona con masilla de madera de dos componentes.



En las imágenes vemos marcadas con un círculo, algunas de las zonas reconstruidas con la masilla.
En las zonas más asequibles que sufrían de pérdidas volumétricas, realicé injertos de madera, en este caso madera de pino, la misma que la del cajón.


El injerto se mechonó y se encoló, así como también se le dió la forma ligeramente curvada del frontal del cajón.
El fondo del cajón se chuleteó también con madera de pino con el fin de dar más resistencia al mismo.


Y hasta aquí llegó mi trabajo.


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